El Cartel de Tintorero, un panfleto y par de mentiras.

 por Roberto A. Lamelo

No voy a hablar de Padilla, ni de Mendez, ni del guante del catcher – o sea, de la mascota de Pestano -, ni de Yobal bandera en mano… no, voy a hablar de otra cosa. Voy a hablar de un panfleto y dos mentiras. 

Mi opinión sobre estos hechos es invariable y ya la expresé. Ya “regañé” a Padilla y a Méndez y también a Tintorero. Ya regañé entre líneas a una forma de vivir que no sabe apretujarse con la otra. Ya regañé la ambivalencia y el extremismo, pero no habia aún regañado a la mentira. En lo particular, no sé vivir con ella, a pesar de haber vivido ultimamente gracias a una mentira continuada a la cual, cariñosamente mis compañeros de trabajo y yo apodamos “ ZREC” No me pregunten el significado. No lo diré y además no tiene nada que ver con esta historia. 

Cuando estaba en el 4to año de mi Carrera, año 93, año duro, el más duro de todo el llamado Período Especial, descubrí un día, en diapositivas viejas – aclaro, diapositivas viejas con imágenes viejas – que aquel slogan que lanzaban en la TV cubana a toda hora de “ Quien se levanta hoy con Cuba se levanta para todos los tiempos” , como recurso infallible para recabar ayuda internacional, no era como “ellos decian” 

En aquella diapositiva exhibida en plena aula una mañana de mayo, se leía que en lugar del  CON, lo que había era un EN. Una frase pronunciada por Martí hacía muchísimo tiempo, expresada al clamor de la necesidad de lucha frente al colonialismo español  y en estricto apego al derecho de sus hijos a luchar por ella. Pero como bien nos hizo notar la profesora ante mi certera acotación, es que la frase, cambiaba evidentemente de contexto si tú cambiabas el EN por el CON. O sea que el EN era del Siglo XIX y el CON era para el XX.

-            - No sé por qué hacen eso, dijo la profesora, y movió su cabeza de un lado al otro intermitentemente durante dos segundos.

Era verdad cruda y sincera: la frase del XX era un engaño. O parecía serlo, pues la diapo, no era una diapo a un texto de Martí si no a un cartel escrito en un muro, en no sé cual avenida habanera en los días de la lucha por derrocar a Machado (quizás Machado). Cuando aquello el Fifo no estaba ni en los forros de su padre. Hago la salvedad para evitar la suspicacia.  En aquel momento no me preocupé por saber si era una frase que pronunció o algo que escribió nuestro Héroe Nacional. Habían transcurrido tantos años desde que la dijo… Hoy he recordado la anécdota de aquel día en el aula, y la cara que puso la teacher, una prestigiosa intelectual cubana. 

Si alguna cuota de defensa puede tener quien la trajo a la luz casi un siglo después, es que la  frase, desgastada y borrosa en esos cien años, bien podía pertenecer a una memoria auditiva, al boca a boca – como dicen por la calle – y esa búsqueda, en ocasiones se hace angustiosamente difícil. No es Cuba el único país en el cual salta alguien, dispone, ordena y los demás cumplen y respetan; cuando sale a la luz el dislate es cuando se forma el corretaje.  Asi que quizás alguien dijo que Martí expresó y nadie tuvo en reparos en corroborar lo dicho por el Apóstol.

Pero de esa mentira, a estas dos otras va un buen trecho. En estas otras dos, al mentiroso se le atrapa más rápido y fácil que a un minusválido.

Yo no sé si Saavedra, Tintorero, los de Vigilia Mambisa, los periodistas del Herald y de lo que no es el Herald, pensarán que uno es tonto, o que no tiene memoria, o que no sabe usar una laptop e Internet… pero a mi me parece que repetir la mentira, tantas veces, algún objetivo se trae, y la gente repite, y repite como papagayos, que el cartel que portaba Tintorero en Winnipeg decía LA PATRIA ES DE TODOS, a pesar que las imágenes muestran, que el cartel decía otra cosa: HUMAN RIGHTS FIRST.

Sí O.k, pero da lo mismo que dijera una cosa o la otra, mencionará alguno en este instante, pero yo pregunto: por qué se empeñan en decir lo que no es, cuando ellos conocen la verdad? Algún objetivo tiene, y es que nada tiene que ver una frase con la otra, aunque en ambas coloquen a Cuba en la picota pública. 

Ahora, Vigilia y sus miembros - y sabe Dios quien más - están detrás de la burla. “Dicen” en sus panfletos, que los sucesos de Winnipeg fueron primeros que los de Baltimore. Baltimore 2000, Winnipeg 1999… así dice el panfleto, porque claro, ellos saben, o temen, que la inocencia no pueden venderla igual, pienso, porque sospechan que la gente no reaccionará igual si saben que antes de Winnipeg, hubo un Baltimore; que Tintorero, antes de lanzarse al terreno en Winnipeg se había lanzado en el terreno de los Orioles a interrumpir el normal desenvolvimiento del juego entre la escuadra oriunda de Baltimore y la Selección Nacional Cubana de Beisbol. 

Ahora, además, miembros de Vigilia dicen que Yobal Dueñas también estaba envuelto en la murumba y Yoval lo único que hizo con sus manos fue sostener la bandera. Solo narro los hechos tal y como fueron. En apego estricto a la verdad.  Y es que aún recuerdo la frase de mi Viejo, tan contrario al comunismo cubano como el que más, el día en que ambos veíamos el juego de Cuba vs Canadá en los Panamericanos:

-                 - Coño, este es el mismo al que le dieron el estrallón.

Por qué, pregunto, no dicen las cosas tal y como fueron? Por qué querer engañar, confundir, tergiversar? Algo se oculta detrás. No tengo dudas. 

Lo bueno de esta Vigilia, sus miembros, y su aplanadora ruinosa y amarilla como la sombrilla de Marcolina, es que, como me dijo un día uno de mis grandes amigos de acá: SON CUATRO GATOS ARMA BULLA, QUE NI PINTAN NI DAN COLOR y han perdido, después de lo de Elián, el poco prestigio que les quedaba.