La información me llegó por un cable: El deshielo ártico elevará el nivel del mar entre 0.9 y 1,6 metros en el 2100, respecto a los niveles de 1990, lo que supondrá un severo riesgo para los cientos de miles de personas que viven en zonas costeras y pequeñas islas, según el informe presentado en el congreso Arctic Fontiers.
Ese “severo riesgo” me incluye –bueno no, habría que darme el premio al más longevo del planeta, quise decir incluye a mi ciudad, que no es lo mismo ni se escribe igual. Y algún egoísta pudiera decir, qué más da, si ya no andaré ni por estos lares y que mis cenizas vayan a parar a donde mejor les plazca…pero ¿y el resto de la humanidad?
La ciudad de Cienfuegos está asentada en la costa sur cubana, por demás la más baja de las dos que rodean a la Isla, de ahí que sus playas no tengan la calidad de las que están del otro punto cardinal –siempre el norte, coño qué casualidad. Si hacemos un ejercicio de abstracción: qué suerte correrán cayo Carenas o Alcatraz, a dónde tendrían que mudarse los pobladores de El Perché o qué sería de La Punta y hasta Rancho Luna está en riesgo…
Sigue el dichoso cable: Los científicos prevén que el aumento de las temperaturas en el ártico, especialmente durante el otoño y el invierno, continúe en los próximos años, aún teniendo en cuenta escenarios en los que las emisiones de gases de efecto invernadero sean menores a lo que han sido en la última década, de ahí la necesidad de adquirir compromisos vinculantes más efectivos que los que existe hasta la fecha.
El futuro de los terrícolas es incierto. La extensión del Protocolo de Kioto, firmado en Doha no fue lo que esperaba la humanidad, los países desarrollados persisten en emitir a la atmósfera el desecho de sus superproducciones, cada quien hace lo que le da la gana con la naturaleza y esta a su vez responde con cada vez más arrasadores meteoros, grandes inundaciones, incendios forestales de extensas proporciones y los stunamis se adelantan a 2100 en su empeño por borrar de la faz de la Tierra a quienes viven en o cerca de las costas.
Nada, continuemos con la crónica de nuestro tiempo para que las futuras generaciones conozcan cómo fue el planeta que habitamos en este 2013. Pero también removamos
conciencias universales para impedir que tanta belleza natural desaparezca por culpa del anunciado diluvio a cuenta gotas. Vamos que Cienfuegos no es el ombligo del mundo, pero por su ubicación y condiciones… pensándolo bien pudiéramos aspirar a alguna que otra clasificación más allá de su ya declarado Centro Histórico como Patrimonio Cultural de la Humanidad. –que por cierto, una parte está bien cerca del mar…
Por Boris L. Cuartero García
No hay comentarios:
Publicar un comentario