Por RAFAEL ROFES PEREZ
El inicialista matancero Michel Abréu sigue desaforando pelotas en tierras japonesas con el conjunto Hokkaido Nippon-Ham Faighters de la Liga Profesional beisbolera en la tierra del Sol Naciente.
Hasta este martes el espigado toletero bateaba exactamente para 300, jugados ya 26 encuentros con dicha novena, en los que ha disparado 27 hits en 90 comparecencias al rectángulo, para demostrar una vez más que da “palos” dondequiera.
En su producción ofensiva se incluyen par de dobles, 9 cuadrangulares y ya tiene un total de 19 impulsadas, por lo que deben estar bien felices los directivos de los Faighters con tan loable desempeño de nuestro compatriota.
Estos guarismos reflejan fehacientemente la calidad de Michel, más si tomamos en consideración que el pitcheo japonés –como se conoce- posee un muy buen nivel y se torna por demás bastante incómodo a la hora de conectarle.
Recuerdo que en una entrevista que le realicé en marzo de este año –la que por cierto anexo al final de estas líneas-, me dijo que siempre entrena fuerte y se cuida cada vez más para mantener su forma.
“El nivel mundial está cada día más competitivo y hay una gran cantidad de jugadores con calidad alrededor del mundo”, me comentó.
En lo personal me alegro muchísimo por Michel, quien se merece todo el éxito del mundo por su dedicación y entrega en cada salida al terreno de juego.
¡Pa’lante, campeón! Sé que seguirás deleitando al público nipón y a todos los cubanos que rastreamos tus huellas y resultados beisboleros.
Y ahora convertido en un “samurai” a lo cubano, convencido estoy que te quedan muchísimas más pelotas por enviar fuera del parque con tu sello propio.
Aquí la entrevista (marzo 3 del 2013)
Michel Abréu: Un pelotero GIGANTE de la gorra a los spikes
Por RAFAEL ROFES PEREZ
Sencillo, amable, cordial y con esa cubanía que siempre lo ha caracterizado anda por territorio nipón el inicialista Michel Abréu. ¿Su objetivo? Continuar su fructífera carrera por aquellas lejanas tierras ante el llamado de los directivos del béisbol profesional de ese bello país, quienes saben perfectamente que es un tremendo pelotero.
Reclutado por el conjunto Luchadores de Nippon Ham, este hijo de la Atenas de Cuba, de más de seis pies de estatura y 34 años de edad, fue designado como el Jugador Más Valioso de la Liga Mexicana en el 2012 al promediar ofensivamente para 371 y deslumbrar a los entendidos y a sus seguidores, algo bien común en él desde que salió de Cuba para probar suerte en el exterior.
Precisamente con Michel sostuve hace solo unos días una aménica plática, en la cual aproveché para “tirarle” varios “lanzamientos”, los que contestó con la misma seguridad y rapidez con la que hace el swing con el madero en cada partido de béisbol y que deseo compartir hoy con ustedes.
¿Cómo, dónde y por qué te inicias en la pelota?
“Me inicié en la ciudad de Matanzas en el histórico y legendario Palmar de Junco. El Indio fue mi primer entrenador. La pelota siempre me encantó desde pequeño y acostumbraba a jugarla con muchachos mayores que yo en mi barrio, y de una manera u otra me colaba en sus pitenes. Fue una etapa muy bonita”.
Tu debut en Series Nacionales…, ¿cuándo se produce?
“Fue en la temporada 1994-95, pero antes había participado en la Liga de Desarrollo”.
Recuerdos de aquella etapa…
“Fue una etapa en la que Matanzas tuvo muy buenos peloteros y equipos y una linda afición muy conocedora de la pelota. Y nunca olvidaré que en cada partido importante estaba presente esa contagiosa conga de la Marina”.
¿Cuál fue el lanzador que se te hizo más difícil en aquella pelota?
“Fundamentalmente José Ariel Contreras y Faustino Corrales, aunque normalmente le bateo muy bien a los zurdos, pero Faustino se me hacía bien difícil. Recuerdo que mi madre, que en paz descanse, siempre bromeaba conmigo cuando él iba a lanzar en mi contra. Y en cuanto a Contreras considero que fue el mejor pitcher de la etapa del 95 al 2002, en la que yo jugué. Tenía muy buena velocidad, efectivos lanzamientos de rompimiento que sabía muy bien localizarlos y nunca me dio pitcheos cómodos bateables”.
¿Por qué tuviste tantos problemas para hacer el equipo CUBA?
“Figúrate, esas eran decisiones de la Comisión Nacional. Solo ellos tenían esas respuestas. Pero a decir verdad había muchos buenos inicialistas por aquella época, encabezados por Orestes Kindelán, pero aún así pienso que rendí lo suficiente para estar en varios equipos Cuba”.
¿Siempre quisiste probar suerte en el exterior?
“Sí. Siempre quise probarme como pelotero fuera de Cuba. Desde chiquito me gustaban y seguía a varios jugadores de Grandes Ligas y siempre pensé que algún día podría estar yo allí como ellos”.
¿Qué ha pasado entonces que no has podido llegar a las Grandes Ligas de Estados Unidos?
“Bueno, eso solo lo sabe Dios. Pero de hecho estoy muy agradecido con los Mets de Nueva York por haberme dado la oportunidad de formar parte de su organización. Tuve buenos números y por solo darte un dato te digo que en el 2006 fui el primer cubano en quedar champion bate en Ligas Menores y fui el MVP ese propio año y líder en todos los departamentos de mi equipo de Doble A. He conocido a jugadores que por mucho menos que eso, llegaron aunque fuese un día a la Grande. En Triple A tuve 286 de promedio, di 15 jonrones, impulsé casi 70 carreras. En el último mes en las Menores, agosto, promedié para 436 y di seis jonrones. Nadie terminó mejor que yo y tampoco me dieron la oportunidad. Así son las cosas”.
¿A cuáles peloteros admiraste y admiras hoy?
“En Cuba, Omar Linares era mi favorito, pero a Orestes Kindelán, Antonio Pacheco, Luis Ulacia, Víctor Mesa, José Estrada, Fernando Sánchez y Germán Mesa, también los admiraba mucho por lo grande que eran. Y en Grandes Ligas hoy a Alex Rodríguez, Miguel Cabrera, Albert Pujols, y a Derek Jeter los sigo bastante por todo lo que han hecho y siguen hacienda en ese béisbol”.
Háblame de tu incursión por la pelota de México…
“A México tengo que darle miles de gracias por haberme dado el chance de poder jugar en sus dos ligas profesionales. Allí me fue muy bien gracias a Dios y lo cierto es que se piensa cuando uno va allí que es una liga diferente, ya que supuestamente algunos dicen que los mexicanos son los de menos calidad dentro del béisbol del Caribe, pero cuando uno llega a México a jugar tiene que ponerle el extra a cada encuentro, y donde en los tres años que estuve en esas ligas vi pasar aproximadamente a unos 20 peloteros extranjeros dados de baja por bajo rendimiento entre las dos organizaciones en las que estuve y la mayoría con experiencia en Grandes Ligas”.
Pero has jugado también en unos cuantos países más, ¿no es así?
“Efectivamente. He jugado prácticamente en todo el Caribe. Además de México, estuve por República Dominicana, Venezuela, Puerto Rico, Nicaragua… En todos esos lugares he sacado un poquito de experiencia, provecho y aprendizaje. Todos los que están allí son muy buenos jugadores a nivel mundial y pienso también que fue una bonita oportunidad que tuve de haber conocido un tanto de cada cultura y el béisbol de esos países”.
¿Y cómo te sientes ahora por Japón?
“Me siento muy bien, esa es la pura verdad. Los japoneses me vieron jugar en México a través de videos y dos scouts internacionales que tienen, que son norteamericanos, me observaron en las Menores en Estados Unidos, entonces me invitaron a sus entrenamientos aquí para ver si estaba en forma, aunque estaban casi seguros que me quedaría con ellos, pues sabían que podia batear al revisar los números que me acompañaban en ligas anteriores. Y te digo que me han tratado de maravillas y todo el tiempo hacen lo posible para que me sienta como en casa, ya que conocen que esta es una cultura con costumbres totalmente diferentes para mí”.
¿A qué atribuyes tu consistencia como pelotero año tras año?
“Mira. Cada año que pasa me cuido más y trabajo más fuerte, porque el béisbol a nivel mundial está cada día más competitivo y hay una gran cantidad de jugadores con calidad alrededor del mundo. También he tenido la suerte de contar todo el tiempo con mi familia que tengo a mi lado y la de Cuba. Me dan la fuerza y confianza suficiente cuando más lo necesito. Y quiero destacar del mismo modo la ayuda y gran la labor de mi amigo personal Yobal Dueñas, quien está al frente, junto a Angel López, de la Academia Beisbol Total, en Tampa, Florida, donde me preparé duarante la Off season y eso me ha permitido llegar en forma a las diferentes ligas donde he jugado. El entrenador de pitcheo Orlando Chinea y sus pitchers igualmente han colaborado en conjunto con esta Academia para el buen rendimiento y preparación de muchos de nosotros los peloteros cubanos”.
¿Algún saludo a la gente que te sigue en Cuba y otras partes del mundo?
“Las gracias por el apoyo que demuestran a diario a través de las redes sociales y a toda la gente que me sigue, incluida la que se he encontrado y se me ha acercado en los diferentes países que he visitado y que van a los estadios a saludarme y apoyarme personalmente. Y que sepan todos, que me siento muy cubano, aunque el destino me haya llevado hasta otras tierras”
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